Por años, los productores han preguntado a los fabricantes de sistemas de riego, "¿Cómo puedo saber si mi regulador de presión no funciona?" y la industria siempre ha respondido con "Bueno, no es tan fácil". Sin embargo, es posible comprobar los reguladores de presión usando manómetros e incluso identificar visualmente los reguladores de presión que funcionan mal.
Los síntomas más comunes que se ven en reguladores de presión defectuosos incluyen:
- Fuga entre las carcasas del dispositivo
- Nebulización o riego excesivo en algunas áreas
- Mayor consumo de agua y energía
- Chillidos agudos
Algunos reguladores de presión que funcionan mal emiten agua a través de los lados del regulador cuando fallan estructuralmente. Por lo general, esto sucede porque el regulador se instaló antes que una válvula de cierre.
Un regulador que no funciona correctamente puede provocar una presión del aspersor demasiado alta. Un aspersor que emita un rociado más fino o muestre una velocidad de rotación más rápida en relación con los aspersores adyacentes puede indicar que un regulador está funcionando por encima de su capacidad nominal. Si funcionan por debajo de su capacidad nominal, los aspersores producirán gotas más grandes, una velocidad de rotación más lenta y un menor diámetro húmedo.
Estos síntomas pueden detectarse fácilmente durante una verificación visual del sistema o notarse en lecturas inusuales del medidor de caudal. Las señales más comunes en el campo son:
- Lugares secos cerca del aspersor
- Riego excesivo en forma de rosquilla
- Crecimiento desigual del cultivo
- Rayas en el campo
El mejor momento para inspeccionar visualmente su sistema es temprano o tarde en el día cuando el sol está bajo, ya que las diferencias entre los aspersores son más fáciles de identificar bajo esta luz.
¿Cómo se prueban los reguladores de presión?
Todos los agricultores deben revisar sus reguladores de presión al menos una vez cada tres años. Puede probar los reguladores de presión instalando un manómetro de alta calidad en cada lado del regulador.
El manómetro en el lado de entrada asegura que haya suficiente presión para que funcione el regulador. Recuerde que la presión de entrada debe ser de al menos 0,34 bar por encima del valor nominal del regulador de presión para que el regulador funcione. El manómetro en el lado de salida (después del regulador) debe coincidir con la presión predeterminada impresa en el dispositivo, permitiendo una ligera variación debido al caudal.
Si su distribuidor de riego tiene un dispositivo de prueba de regulación, también puede verificar las lecturas en un nuevo regulador de presión que coincida con el modelo que está probando.
Por qué se dañan los reguladores de presión
Aunque los reguladores duran años, el grado de regulación cambiará con el tiempo a medida que las piezas internas comiencen a desgastarse. Cualquier cosa con piezas móviles se desgasta con el tiempo y los reguladores de presión no son diferentes.
Las condiciones bajo las cuales operan los reguladores de presión influyen en su vida útil. Los factores que contribuyen al desgaste incluyen:
- Mala calidad del agua
- Materiales abrasivos en el agua
- Productos químicos no desechados en la tubería
- Horas de funcionamiento prolongadas
Mala calidad del agua
La calidad del agua juega un papel importante en la vida útil de los reguladores de presión. Las fuentes de agua superficial pueden contener arena y materia fibrosa. Con el tiempo, los materiales abrasivos suspendidos desgastan el asiento y el extremo del vástago de regulación, lo que altera el rendimiento del regulador.
Algunas fuentes de agua superficial contienen productos químicos de la escorrentía, incluido el petróleo, que pueden causar daños a los componentes del regulador de presión. Los sistemas que usan agua de pozo con alto contenido de hierro ven acumulación de óxido en los componentes.
Estas instalaciones deben emplear filtración para ayudar a garantizar el funcionamiento adecuado de los reguladores y aspersores.
Químicos no lavados en la tubería
Los sistemas de riego se utilizan con frecuencia para aplicaciones químicas. Las sustancias químicas como el nitrógeno, los fertilizantes y las soluciones utilizadas para combatir insectos y malezas pueden dañar los componentes del regulador interno.
Es mejor lavar el sistema después de cada aplicación química para evitar que los residuos descansen dentro del regulador.
Largos períodos de funcionamiento
Los reguladores instalados en sistemas que funcionan durante muchas horas durante la temporada se desgastarán más rápido que los que funcionan durante menos horas. Los componentes móviles internos funcionan de manera diferente a medida que cada uno comienza a desgastarse.
Algunos expertos recomiendan reemplazar los reguladores cuando alcancen las 10.000 horas de funcionamiento.
Una mirada en profundidad a la resolución de problemas
Consulte la guía del regulador de presión de agua para riego para obtener más información sobre la importancia de mantener la presión correcta del sistema para conservar agua y energía, consejos para la solución de problemas y respuestas a las preguntas frecuentes.
Aprenda a identificar problemas de desgaste y qué hacer al respecto con el curso gratuito de regulación de la presión de Senninger en Hunter University. Aprenderá a instalar reguladores de presión en diferentes sistemas de riego, seleccionar un modelo, identificar las causas de las fluctuaciones de presión y más.
